Los distintos crímenes tuvieron lugar en Mendoza, Buenos Aires y Chubut.
El 6 de febrero pasado, la localidad bonaerense de William Morris, en el partido de Hurlingham, fue protagonista de una serie de asesinatos por parte de un expolicía. El homicida, identificado como Diego Loscalzo, mató a balazos a su pareja, Romina Maguna, y a cinco integrantes de su familia, incluyendo a un bebé por nacer.
Luego de que la policía lo atrapara en la provincia de Córdoba, se lo sometió a distintas pericias psiquiátricas que determinaron que Loscalzo estaba en perfecto estado mental y con total conocimiento de la gravedad de los asesinatos que había cometido.
Uno de los casos más similares, fue en octubre pasado, pero en Godoy Cruz, provincia de Mendoza. Tres mujeres fueron asesinadas a puñaladas y dos niños quedaron gravemente heridos por parte de la pareja de una de las víctimas.
Claudia Arias de 31 años, estaba junto a tres de sus hijos menores de edad, su tía Marta Ortiz, y su abuela Silvia Vicenta Díaz de Ortiz, cuando su pareja, Daniel Gonzalo Zalazar Quiroga, de 30, fue a su casa y las mató.
Dos meses antes, en la localidad bonaerense de Béccar, un joven baleó a su exnovia, mató a su exsuegra y a un vecino y luego se suicidó. El hecho, fue protagonizado por David Rosas, de 22 años, apodado “Chucky”.
El 12 de septiembre, en la ciudad chubutense de Comodoro Rivadavia, un efectivo de la Prefectura, identificado como Marcelo Soria, asesinó a balazos a su exsuegra y a su excuñado, hirió a los dos hijos adolescentes de su expareja y también se suicidó.
La costa argentina también fue protagonista, cuando el 7 de julio, en Necochea, un empleado municipal asesinó a puñaladas a tres de sus hijos y a su exesposa, degolló a un vecino y luego hirió a dos policías que pretendieron detenerlo. Luego del episodio, Roberto Daniel Vecino, de 56 años, se atrincheró en un galpón y se ahorcó.