Julieta Bonnano pasó de ser testigo del crimen a estar involucrada. Está detenida desde el pasado jueves a la madrugada. Ahora, hay más pruebas que la complican y un extraño llamado al 911.
Los peritos de Científica de la Policía de la Ciudad encontraron rastros de pólvora en las manos de la abogada y en las manos de la menor de las víctimas, lo que genera más hipótesis sobre cómo fueron los hechos. Se trata de restos de plomo, antimonio y bario, componentes que se dispersan e impregnan en la mano de alguien que dispara.
Además, según las fuentes, en el domicilio se incautaron tres pantalones (dos color crema y uno blanco), un saco negro y un par de botas bordó, entre las mismas, estarían las prendas usadas por la abogada ese día.
La comunicación entre la abogada y los efectivos dura un minuto: