Tres jóvenes fueron a cenar a “Bambú”, un restaurante chino conocido de la provincia, pidieron diversos platos y al ver la cuenta de 1000 pesos, intentaron escaparse para no abonar.
El grupo de amigos de 18, 24 y 25 años, llegaron al lugar alrededor de las 22.30, una vez que terminaron de comer, se miraron entre si y comenzaron a caminar hacia la puerta. Sin embargo, un empleado los vio con una actitud sospechosa y alertó a sus compañeros.
“Mientras uno avisó al comando, los demás frenaron a los clientes hasta que llegó la Policía”, contó el comisario Guillermo Rivera. Luego, un patrullero de la Comisaría Segunda llegó al restaurante y detuvo a los tres jóvenes, quienes no abonaron la cena, pero fueron trasladados hasta esa comisaría. De esta manera, fueron acusados por delito de estafa, ya que al momento de hacer sus pedidos, sabían que no contaban con plata para pagar. Finalmente, fueron liberados.